Destacados

Un proyecto de restauración ecológica frenará los procesos de desertificación de Famara

La restauración de Famara mitigará la desertificación que sufre la isla. Imagen cedida
La restauración de Famara mitigará la desertificación que sufre la isla. Imagen cedida

A finales de 2020 se puso en marcha un proyecto piloto de restauración de hábitat en las cumbres de Famara, en Lanzarote, basado en el establecimiento de parcelas de control para el ensayo de distintos modelos de restauración de hábitats áridos.

El proyecto, liderado por la Consejería de Transición Ecológica, Lucha contra el Cambio Climático y Planificación Territorial del Gobierno de Canarias, se encargó a la empresa pública Gestión y Planeamiento Territorial y Medioambiental (Gesplan S. A.). Esta iniciativa, financiada con recursos del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (PO FEDER Canarias 2014-2020), tiene previsto desarrollarse hasta diciembre de 2022.

La mejor propuesta para contrarrestar los hábitats áridos 

En 2019, la Consejería organizó un taller de expertos, con la colaboración del Cabildo de Lanzarote, con el fin de poner de manifiesto los problemas de conservación asociados a los hábitats áridos de las islas y proponer medidas de restauración. 

En el marco de dichas jornadas, científicos, investigadores y gestores de diferentes instituciones y administraciones debatieron y consensuaron las principales actuaciones a desarrollar para la restauración de hábitats en Lanzarote, con el fin de frenar los procesos de desertificación, que se están viendo acelerados como consecuencia del cambio climático.

Ocho objetivos para una restauración eficaz

El proyecto cuenta con ocho propósitos clave:

  1. Asegurar la disponibilidad de material vegetal para abordar con éxito las labores de revegetación de las parcelas experimentales.
  2. Establecer parcelas de productores que garanticen la disponibilidad de semillas durante todo el periodo de duración del proyecto, aún en condiciones climáticas desfavorables.
  3. Potenciar el enriquecimiento de la microbiota del suelo con el fin de incrementar las probabilidades de éxito de las labores de restauración.
  4. Abordar el estudio de los suelos objetivo, así como el desarrollo de mecanismos para evitar la erosión.
  5. Limitar el acceso de los herbívoros a los enclaves de actuación más sensibles del proyecto.
  6. Acondicionar las parcelas objetivo para poner en práctica las diferentes metodologías experimentales que permitan desarrollar las labores de restauración del hábitat, así como una balsa como bebedero para aves.
  7. Obtener planta viva a partir de material seminal originario de la cumbre e introducirla en el medio aplicando técnicas experimentales de inseminación y plantación.
  8. Diseñar y realizar una campaña de divulgación del desarrollo del proyecto.

Colaboraciones más significativas

Para lograr esos objetivos, se cuenta con la colaboración de las áreas de medio ambiente y agricultura del Cabildo de Lanzarote, que han cedido las parcelas de titularidad pública ubicadas en la cumbre para el desarrollo de los trabajos y han puesto a disposición las instalaciones de la Granja Agrícola Experimental del Cabildo, que se empleará para la producción de planta.

También participan en los ensayos experimentales investigadores de edafología y microbiología de la Universidad de La Laguna, así como del Instituto Canario de Investigaciones Agrarias, incluido el Jardín de Aclimatación de la Orotava, que se encargarán de poner su experiencia y conocimiento en el uso de nuevas técnicas de tratamientos de suelos, tanto en las parcelas de restauración como en los huertos de productores, y en la selección de especies que conformarán la restauración del enclave.

Implicando a la comunidad educativa local

Otro gran objetivo es crear conciencia y sensibilizar. Se trabajará, además, conjuntamente con la Reserva de la Biosfera de Lanzarote y las entidades locales para generar fórmulas de participación ciudadana, custodia del territorio y educación ambiental. Esto es muy importante, ya que están directamente relacionadas con las labores de restauración del proyecto y con el objetivo de que la sociedad conejera haga suya esta iniciativa y propicie, de esta manera, su continuidad en el tiempo más allá del periodo de ejecución previsto.

Dentro de las actuaciones planteadas se incluye la creación de una parcela de productores de semillas, cuya implantación, desarrollo y mantenimiento se convertirá en una actividad educativa dentro de los ciclos formativos que se imparten en el IES de Teguise, concretamente en los ciclos ‘Actividades auxiliares en Viveros y Centros de Jardinería’ y ‘Agrojardinería y Composiciones Florales’. 

De esta manera, el alumnado complementará su formación con un proyecto real a desarrollar en su comunidad, contribuyendo, con su trabajo, a frenar el proceso de desertificación de las cumbres de la isla.

La restauración de Famara medirá su impacto para mejorar el diseño de proyectos futuros

Otro aspecto novedoso del proyecto es que mide el impacto de cada una de las unidades de obra en el medio natural, calculando la huella y el sumidero de carbono, con el fin de poder corregir el diseño de proyectos futuros así como valorar la incorporación de este factor en los pliegos de contratación a desarrollar por el Gobierno de Canarias. Con este criterio se prioriza la contratación de los profesionales y de los suministros necesarios sean de Lanzarote, lo que revertirá positivamente en la economía local.

Cumpliendo con otro compromiso ambiental se intentará reducir el consumo de plásticos en todas las fases del proyecto, por lo que se realizarán pruebas experimentales con contenedores biodegradables en vez de las tradicionales macetas y macetones, usados habitualmente en las labores de producción de plantas en vivero.

Una nueva fórmula con miras al futuro 

Con esta iniciativa se aborda un nuevo modelo de trabajo en materia de restauración ambiental centrada en la importancia de la recuperación del suelo, tanto desde el punto de vista físico-químico como microbiológico, dando importancia a las micorrizas y a las bacterias fijadoras de nitrógeno en el funcionamiento de los hábitats áridos.

Este proyecto es innovador desde la perspectiva técnico-científica, a la vez que promueve la colaboración entre instituciones y sectores de la sociedad, pues sirve como punto de partida para la recuperación de la vegetación original de los altos de Famara y tiene como finalidad facilitar su continuidad futura y frenar el proceso de desertificación que sufre la isla. 

Categorías
Canarias por la transición ecológica Territorio Economía circular Agua Biodiversidad y recursos naturales Acción climática Transición energética